Sigue leyendo y descubre todas las extrañas y estrictas reglas que incluyen temas como el vestuario, los corgis reales, los juegos de mesa prohibidos y todo lo demás.
Los miembros de la familia real no pueden firmar autógrafos
¿Siempre has querido enmarcar la firma de algún miembro de la realeza? Pues lamentamos ser portadores de malas noticias, ningún miembro de la monarquía británica está autorizado a firmar autógrafos. ¿Es posible hacerse fotos con ellos? Sí, aunque las selfies están prohibidas. El razonamiento detrás de estas reglas es bastante lógico: una medida básica de seguridad contra posibles falsificaciones.
Todos los miembros de la realeza deben seguir esta política antifraude. Cuando en una ocasión le pidieron al rey Carlos un autógrafo, éste se negó cortésmente diciendo: “Lo siento, no me lo permiten”.
Protocolo para tomar el té
Una lista de protocolos sobre la familia real británica estaría incompleta si no mencionase alguno relacionado con el té. Por supuesto, solo hay una manera correcta de sorber esta bebida: hay que sujetar el asa de la taza con los dedos pulgar e índice y al mismo tiempo se sostiene la base con el dedo corazón.
Mientras toman el té, las mujeres de la familia real deben recordar beber sorbos siempre por el mismo sitio para evitar manchar toda la taza de carmín, lo que se considera indecoroso y de mala educación.
El monarca no puede sentarse en un trono que no sea el suyo
La reina Isabel realizó una visita muy mediática al set de Juego de Tronos en Belfast (Irlanda del Norte). La serie creó miles de puestos de trabajo para los habitantes de la zona y, como recompensa, la reina visitó a los creadores y al reparto de la serie.
Cuando le ofrecieron la oportunidad de sentarse en el Trono de Hierro, la reina la rechazó educadamente. Resulta que los monarcas no pueden sentarse en un trono ajeno al suyo, ni siquiera si se trata del codiciadísimo Trono de Hierro.
La realeza no cobra por trabajar
Los contribuyentes británicos y el patrimonio heredado mantienen a la familia real. Los miembros de alto rango de la familia real, como el rey Carlos, el príncipe Guillermo y Kate Middleton, no pueden cobrar por trabajar. Los tratos comerciales, como anuncios o discursos, se consideran un conflicto de intereses. En su lugar, obtienen ingresos de la Subvención Soberana o a través de sus respectivos ducados.
¿Y qué hay del resto de la realeza? Resulta que algunos tienen trabajos normales. La princesa Eugenia es directora de una galería de arte londinense, mientras que la princesa Beatriz es vicepresidenta de una empresa de software.
Si llevan abrigo, no pueden quitárselo
El estatus de la princesa Catalina como icono de la moda es indiscutible. Todos sus conjuntos son ideales, desde el vestido, pasando por los accesorios, hasta los abrigos de moda que tanto nos gustan. Además de provocar envidia por su estilo, los abrigos de Catalina dieron que hablar cuando la fotografiaron con uno puesto dentro de casa. ¿Por qué no se lo quitaba?
Resulta que el protocolo de la realeza británica considera poco femenino que las mujeres se quiten el abrigo en público. Lo mejor es asegurarse antes de que el tiempo exige un abrigo, ya que una vez que se lo ponen no se lo pueden quitar, independientemente del evento o la circunstancia.
No se les puede comprar ni comida ni bebida
La realeza lleva un estilo de vida increíble, en la que la comida y la bebida exquisitas son una parte fundamental, pero no es oro todo lo que reluce. La familia real tiene una larga lista de cosas que se pueden hacer y que no, en relación con la comida. Una de las más pragmáticas es no aceptar nunca comida o bebidas de extraños en actos no oficiales.
Esta regla pretende proteger a la familia de posibles envenenamientos, sobre todo desde que no viajan con catadores reales.
Vestirse para triunfar diplomáticamente
Los atuendos diplomáticos de la familia real pretenden reforzar los lazos internacionales, en las visitas de estado, los miembros de la familia deben incorporar elementos de la cultura local a su indumentaria. La reina lució un deslumbrante traje verde en su visita a Irlanda en 2011, un país con el que históricamente Inglaterra ha tenido rencillas. Recibió una calurosa bienvenida, más que la mayoría de los políticos.
Otros miembros de la familia han seguido sus pasos. El príncipe Guillermo lució un Sherwani (abrigo abotonado) en Pakistán, mientras que Catalina se puso una Kira (falda) tradicional butanesa en su primer encuentro con los reyes de Bután.
Los miembros de la realeza no pueden llevar pieles
Eduardo III fue uno de los primeros defensores de los derechos de los animales, mucho antes de que este asunto pasara a formar parte del discurso público. En 1337 promulgó la Fur Act (Ley de Pieles), que prohibía el uso de pieles en el Reino Unido. A excepción de clérigos y caballeros, el uso de pieles en el atuendo estaba terminantemente prohibido.
Sin embargo, la familia ha cometido algún que otro desliz a lo largo de los años. La propia reina llevó sombreros de piel en varias ocasiones, lo cual consternó a los defensores de los derechos de los animales.
Es recomendable llevar pantys, pero no obligatorio
Aunque abundan los manuales sobre las normas de la moda de la realeza, algunas son más una exageración que un hecho. Entre ellas está la norma de que es obligatorio llevar medias en los compromisos públicos, la verdad es que no existe ninguna norma oficial al respecto.
No es un mandato oficial, sino más bien una sugerencia para cuando los miembros de la familia real aparecían junto a la reina. Llevas medias era un indicativo de respeto por la monarca y por el talante que solía mostrar su vestimenta.
No tienen permitido jugar al Monopoly
La familia real no jugará a este juego de mesa en particular bajo ninguna circunstancia. Se trata del Monopoly, al parecer la reina “prohibió” que se juegue en la casa real, pero las razones de esto son más entrañables de lo que pudieras imaginar. La historia se remonta a diciembre de 2008, cuando el príncipe Andrés visitó la recién renovada sede de Leeds Building Society en Albion Street.
Antes de marcharse, le regalaron al duque de York una edición de el Monopoly para conmemorar su visita. Cortésmente rechazó el juego, explicando que la reina no permite que jueguen a ese juego en casa porque las cosas se ponen “demasiado tensas”.
El protocolo del escote
Esta resulta obvia, los miembros de la realeza deben vestir recatadamente en los eventos públicos a los que asisten para preservar la dignidad y la integridad de la familia. Los miembros de la familia real deben vestir siempre adecuadamente y evitar atuendos demasiado atrevidos o ajustados. Las mujeres no pueden enseñar demasiada pierna.
Por supuesto, presumir de escote está completamente prohibido. La princesa Diana, por ejemplo, cuando salía de los vehículos solía llevar el bolso pegado al pecho para evitar que los que estuvieran cerca vieran más de lo que debían.
Chicas, la cabeza bien alta
Nadie sabe hacer un protocolo para la realeza como la familia real británica. Llegan al extremo de tener normas específicas sobre cómo bajar las escaleras o cómo quedarse quieto. Las mujeres de la realeza aprenden el arte de bajar las escaleras con la barbilla paralela al suelo, las manos deben estar a los lados en todo momento.
Cuando se hacen fotografías, las mujeres también deben posar en todo momento con la barbilla paralela al suelo. ¡Nada de experimentar con lo ángulos o inclinaciones de cabeza para las fotografías oficiales!
Los invitados pueden levantarse de la mesa antes que el monarca
Si tienes que abandonar la mesa antes de que termine la comida, puedes hacerlo si es de manera discreta. Puede parecer violento marcharse antes que el monarca termine de comer, pero existen maneras de hacerlo.
Si un miembro de la realeza necesita abandonar la mesa antes de que termine la comida, no debe revelar sus motivos, tampoco debe anunciarlo al resto de la mesa, basta con un simple “disculpen” y pueden abandonar la estancia en silencio.
No se recomiendan las muestras de afecto en público
La realeza británica es conocida por su proverbial compostura; sin embargo, ninguna ley oficial prohíbe a los herederos y a sus cónyuges mostrarse afecto en público. La reina sentó un precedente que parece haberse mantenido: animar a los miembros más jóvenes de la realeza, locos de amor, a guardar la compostura.
Algunos futuros monarcas se toman el protocolo muy en serio. El príncipe Guillermo y su esposa nunca se han cogido de la mano ni se han besado en público. El príncipe Harry y Meghan Markle lo tomaron como una clara sugerencia.
Pueden saltarse ALGUNAS reglas
Ser miembro de la familia real conlleva un montón de ventajas, muchas reglas que se nos aplican a nosotros a ellos no les afectan. Por ejemplo, el monarca no necesita carnet de conducir ni pasaporte para viajar. Cuando la policía les escolta para algún evento oficial, pueden saltarse los límites legales de velocidad.
Al igual que su predecesora la reina Isabel II, el rey Carlos tiene inmunidad soberana, lo que significa que queda exento de cualquier investigación penal o civil. Algunos ingresos de la realeza están exentos de impuestos. Aunque tengan apellido, los miembros de la realeza no están en la obligación de usarlo.
Los sombreros solo se aceptan en actos formales
Los sombreros son obligatorios para las mujeres de la realeza y se entiende perfectamente el motivo. Los sombreros sofisticados en los actos solemnes tienden a realzar el estilo al instante. Todos los actos reales formales requieren sombreros y tocados. Es una tradición que se transmite de generación en generación. Las normas eran mucho más estrictas en los años cincuenta, las mujeres de la realeza no podían ir a ningún sitio en público sin sombrero o tocado.
Hoy en día, solo los llevan en los eventos más elegantes. No nos podemos quejar de ello, porque algunos de esos sombreros son impresionantemente bonitos
La familia real debe mantenerse políticamente neutra
Los miembros de la familia real no pueden compartir opiniones políticas, votar ni presentarse a elecciones, la monarquía debe permanecer neutral. Los políticos británicos y la realeza han coexistido durante siglos gracias a unas funciones y responsabilidades claramente definidas.
Como jefe de la Iglesia de Inglaterra y jefe de estado, el rey Carlos tiene mucho trabajo que hacer. Su reinado ya ha sido testigo de varios dramas políticos, como la dimisión de Liz Truss como primera ministra después de tan solo 44 días en el cargo.
Reglas para llevar una tiara
Para la mayoría de nosotros, las tiaras son accesorios de fantasía y cualquier "regla" relacionada con ellas nos parece extraña. Resulta que llevar una tiara es bastante complejo. Hoy en día, la mayoría de los miembros de la realeza llevan su primera tiara el día de su boda, algo que hace décadas no era así.
La princesa Margarita lucía tiaras constantemente, las llevaba tanto a cenas como a representaciones teatrales. Tanto si se es miembro de la realeza de nacimiento tanto como si te unes a la familia al contraer matrimonio, las mujeres esperan hasta su boda para lucir una.
Los corgis reales siempre se salen con la suya
Los corgis reales llevan una vida envidiable. No era ningún secreto que la reina adoraba a sus corgis, dando un nuevo significado a la frase "es una vida de perros". Los perros comen platos gourmet frescos preparados a diario por un chef interno.
Un sirviente designado les entrega la comida en mano una vez el chef la termina. Nadie puede regañar a los corgis de la reina, aunque hagan travesuras. La reina les permitía hacer lo que querían.
Las mujeres de la realeza deben lucir peinados y maquillajes naturales
La familia real no aprueba los maquillajes extravagantes. No encontrarás a ningún miembro de la realeza con delineados de infarto o con un llamativo cabello rojizo. Dentro de los límites de palacio prefieren la naturalidad. Elegante y discreto, ese es el camino a seguir.
Se acepta un ligero contorno facial y tonos neutros para el pintalabios y el esmalte de uñas. Como no está permitido retocarse el maquillaje en público, el peinado y el maquillaje deben permanecer impecables, a veces durante horas.
Los miembros de la familia real tienen que pesarse antes y después de la cena de Navidad
La familia real sigue varias tradiciones navideñas, algunas menos entrañables y más bochornosas que otras. Los miembros de la familia real deben pesarse en balanzas antiguas antes y después de la cena de Navidad, una tradición que se remonta al reinado de Eduardo VII, que duró de 1901 a 1910.
¿Qué razón que hay detrás de esto? Asegurarse de que los invitados han comido bien. Cada invitado debería ganar al menos un kilo durante las fiestas, eso demostraría que realmente han tenido una dulce Navidad. Tenemos sentimientos encontrados respecto de esta regla.
El príncipe Felipe tenía que andar dos pasos por detrás de la reina
El príncipe Felipe, duque de Edimburgo, siempre caminaba dos pasos por detrás de la reina Isabel. Era una señal de respeto. Aunque era el marido de la reina, nunca fue rey, se convirtió automáticamente en príncipe cuando Isabel fue coronada reina.
No debió ser fácil para él vivir bajo la sombra de la reina Isabel. Aun así, el príncipe Felipe siguió siendo su roca, su apoyo y su confidente durante sus casi 74 años de matrimonio, antes de su muerte en 2021.
Los ramos de novia de la realeza siempre contienen mirto
Todas las novias de la realeza desde la Reina Victoria han llevado una ramita de mirto en su ramo. El mirto representa el amor y la esperanza, emociones ideales para cualquier boda. La tradición se remonta al reinado de la reina Victoria, cuando la princesa Victoria lo llevó entre su ramo de novia en 1858.
El mirto ha figurado sistemáticamente en los ramos que han llevado la ahora princesa Catalina, Meghan Markle y Diana. El mirto en cuestión, crece en un arbusto especial que le regalaron a la reina Victoria.
Alimentos que la familia real nunca consume
Aunque resulte difícil de creer, a la reina no le gustaban los carbohidratos como la pasta, el arroz y las patatas, prefería platos que contuvieran carne o pescado con verduras. Casi todas las comidas que se servían en el palacio de Buckingham solían tener un bajo contenido en carbohidratos. ¡Acuérdate de eso la próxima vez que desees casarte con un miembro de la realeza!
La reina también evitaba la corteza de los sándwiches, el agua del grifo en el extranjero y las comidas picantes. Queda por ver si el rey Carlos mantendrá estas tradiciones culinarias o introducirá sus propias peculiaridades.
Trajes de etiqueta para la cena
Da igual lo moderno que seas de cara al resto del mundo. Si te presentas a una cena de la familia real en vaqueros y camiseta, lo más probable es que no te vuelvan a invitar. Para la familia real británica, la ropa formal es la marca de la casa.
Sería todo un espectáculo imaginárselos sentados a la mesa en sandalias, zapatillas deportivas o pijama. Con esta gente hay que vestirse bien y destacar en la cena.
Cómo sentarse como un miembro de la realeza
El único paso en falso que una mujer de la familia real debe evitar es sentarse con las piernas cruzadas sobre la rodilla. Las piernas y las rodillas deben estar juntas, pero cruzar el tobillo es aceptable. La “duchess slant” (inclinación de la duquesa) se ha convertido en una postura popular, término acuñado por Beaumont Etiquette para referirse a la postura preferida de Kate Middleton.
La postura consiste en juntar las rodillas y los tobillos e inclinar las piernas hacia un lado. La pose mantiene la postura de Catalina y hace que sus piernas parezcan más largas sin dejar de parecer recatada; la difunta princesa Diana también se sentaba de esta manera.
Deben aceptar y llevar la cuenta de todos y cada uno de los regalos
Un miembro de la familia real británica debe aceptar los regalos con la mayor elegancia posible, por extraños, extravagantes o poco apropiados que sean. ¿Qué se le regala a la realeza aparte de los aburridos ramos de flores? Y encima a una familia tan rigurosa.
Algunas personas se arriesgaron con sus regalos: desde 500 latas de piña, pasando por jabón para perros, hasta semen de caballo. Al final, el monarca es el que decide quién se queda con cada regalo.
Se recomiendan las reverencias y las inclinaciones del cuello
Aunque la web oficial de la monarquía británica afirma que no hay normas obligatorias a la hora de conocer a un miembro de la familia real, sí menciona la preferencia por la tradición. Inclinarse o hacer una reverencia siempre ha sido la forma habitual de saludar a un miembro de la realeza.
Hacer una reverencia implica inclinarse ligeramente hacia delante y colocar una pierna detrás de la otra. La reverencia suele ir seguida de un apretón de manos, pero solo si el miembro de la realeza extiende primero la suya. En el caso de los hombres, el saludo correcto es una inclinación de cuello, pero no una reverencia completa.
La Navidad siempre se celebra en Sandringham
La familia real debe pasar la Navidad en la finca de la reina en Sandringham, Norfolk. Todos los años, la reina insistía en llegar una semana antes para preparar las celebraciones y dar la bienvenida a todos. La familia real tiene otras tradiciones navideñas que sigue al pie de la letra.
Intercambian y abren regalos durante la merienda de Nochebuena. La familia prefiere pasar el día de Navidad en la iglesia de Santa María Magdalena, situada en la misma finca.
Cuando se deben lucir los uniformes militares
Los miembros de la realeza suelen llevar los uniformes de sus respectivos regimientos cuando los representan en actos militares. El príncipe Guillermo y el príncipe Harry han servido en las fuerzas armadas y utilizan con frecuencia los colores de sus regimientos.
El príncipe Guillermo sirvió en la Real Fuerza Aérea (RAF) y también ostenta el título de coronel de la Guardia Irlandesa. El príncipe Harry se alistó en el regimiento de caballería Blues and Royals del ejército británico y sirvió como piloto del Cuerpo Aéreo del Ejército en Afganistán.
Solo se puede llevar tiara después de las 5 de la tarde
Las tiaras suelen reservarse para los actos que comienzan después de las 5 de la tarde y únicamente las llevan los miembros casados de la realeza. Aunque los actos formales pueden celebrarse durante el día, la realeza evita llevar diamantes cuando brilla el sol. La luz del día y las tiaras brillantes pueden resultar excesivas.
Las tiaras resultan mucho más apropiadas en eventos nocturnos. Las damas de la realeza y sus tiaras destacan mucho más por la noche. Inauguraciones, bailes, coronaciones, visitas de Estado y cenas reales son algunas de las pocas ocasiones en las que una tiara es apropiada.
Está prohibido comer ajo
A la reina Isabel II no le gustaba comer demasiada cebolla y el ajo estaba totalmente prohibido en el palacio de Buckingham. El chef del palacio, John Higgins, declaró en "The National Post": "La reina es una dama encantadora y la familia real son gente maravillosa, pero se están perdiendo el ajo porque en el palacio de Buckingham no se cocina con él. Por si les dan los eructos reales, supongo".
Parece una regla sensata, dadas las numerosas apariciones y reuniones oficiales a las que asiste la familia real. Nunca se sorprendería a ninguno de ellos con mal aliento entre visita y visita.
Para cualquier viaje los miembros de la realeza deben incluir en la maleta un conjunto negro
Los miembros de la realeza británica están más que preparados para cualquier imprevisto. Cada vez que realizan un viaje oficial tienen que incluir en su equipaje un conjunto negro. ¿Por qué? Dispondrían de ropa adecuada en caso de que se produjera alguna muerte repentina, para así presentar sus respetos o asistir al funeral vistiendo de forma adecuada.
Aunque suene morboso, la norma es práctica y tiene sentido para una familia que siempre está en el punto de mira de la opinión pública. Hay quien dice que la regla surgió después de que la reina Isabel se enterara del fallecimiento de su padre mientras se encontraba en Kenia en una gira por la Commonwealth.
Las señas secretas de la reina
Aunque el rey Carlos sin duda ideará sus propios métodos, su madre utilizaba el bolso para enviar sutiles mensajes a su personal durante su reinado. Durante sus compromisos públicos, la reina se pasaba el bolso del brazo izquierdo al derecho para indicar que había terminado de hablar.
Era un gesto que indicaba que estaba dispuesta a poner fin a la conversación y seguir adelante. ¿Por qué no se nos había ocurrido antes?
No puedes tocarles
LeBron James causó un gran revuelo cuando rodeó con su brazo a Kate Middleton mientras posaba para unas fotografías. Es mejor no establecer contacto físico directo con un miembro de la realeza mientras posa para las fotografías. ¿La regla de oro? Esperar y evaluar cuál es la actitud adecuada.
Los miembros de la realeza pueden ofrecerse a rodear a la gente con el brazo o abrazarla. Siempre es bueno reflejar sus movimientos para que la gente sepa lo que es apropiado en cada ocasión.
El monarca debe aprobar las proposiciones de matrimonio
Los miembros de la realeza británica que deseen casarse no pueden hacerlo sin la aprobación del monarca. Es como pedir la bendición del cabeza de familia, pero en este caso se establece por decreto en la Ley de Matrimonios Reales de 1722.
Y la cosa no acaba ahí. La reina también se encargaba de escoger la tiara nupcial de la novia de su colección personal. Habrá que ver si el rey Carlos o la reina consorte Camilla mantienen esta tradición.
¡Nada de apodos en público!
Dejar atrás su antigua vida es un hecho cuando un “plebeyo” se casa con un miembro de la realeza británica. Eso también significa que deben despedirse de los apodos de cara al público, con el matrimonio ha de adoptarse un nuevo nombre formal. Puede que “Princesa Di” o “Lady Di” sea más entrañable que “Diana, princesa de Gales”, pero este último era el único título aceptable.
Técnicamente, a Catalina (Kate) Middleton siempre se la debería llamar "Su Alteza Real la Princesa de Gales". Estos apelativos no siempre salen de los labios de la gente, pero la reina los hubiera aprobado.
Siempre tiene que haber seis cuervos en la Torre de Londres
Según cuenta la leyenda, la monarquía caerá si no hay al menos seis cuervos en la Torre de Londres. ¿Alguien cree eso de verdad? Pues resulta que sí, actualmente viven nueve de estas aves en la Torre. Tras ser advertido de que la Corona y la Torre caerían si los cuervos se marchaban, Carlos II fue el primer monarca en insistir en su protección.
La decisión del rey era contraria a los deseos de su astrónomo, John Flamsteed. Flamsteed estaba en contra de mantener los cuervos porque interferían con su trabajo en el observatorio de la Torre Blanca.
Dos herederos no pueden volar en el mismo avión
Dos herederos al trono no pueden viajar en el mismo avión por si sucediera una tragedia durante el vuelo. La regla puede parecer morbosa, pero su lógica es irrebatible. El rey Carlos y el príncipe Guillermo deben viajar en aviones diferentes si van al mismo destino.
El príncipe Jorge es el segundo en la línea de sucesión después de su padre el príncipe Guillermo. En cuanto cumpla los 12 años, su padre y él no tendrán permitido volver a volar juntos. Ya sea en acto de servicio o para irse de vacaciones, deberán coger aviones diferentes.
Un estricto protocolo para la cena
Una cena real es cualquier cosa menos sencilla, la organización de los asientos es de suma importancia. Hay una oficina dedicada a organizar a los invitados para cualquier evento real. Aunque oficialmente se la conoce como la Oficina del Mariscal de la Corte, prefieren llamarse a sí mismos "mini hosts" (mini anfitriones).
Los invitados se sientan alrededor del monarca por orden de precedencia, pero factores como los intereses, la edad y el idioma también son factores esenciales. La reina se dirigía a los invitados de su derecha durante el primer plato y a los invitados de su izquierda cuando llegaba el segundo.
El arte de llevar bolso
Los bolsos y las carteras son accesorios muy populares en las visitas de la realeza. Aunque cuentan con un séquito que puede llevar sus cosas a todas partes, la realeza cree que llevar bolso la hace más cercana. Nunca aparecen en público sin él, aunque el bolso esté vacío.
Si te fijas, las mujeres de la realeza suelen llevar bolsos en la mano izquierda para tener la derecha libre para estrechar la mano o saludar en los encuentros.
El apretón de manos real
Por supuesto, la familia tiene normas para los apretones de manos. Los miembros de la realeza deben mantener un buen contacto visual al dar la mano al público en general. Un apretón de manos real debe constar de dos o tres golpes, más que eso da mala imagen.
La palma debe estar abierta y el pulgar hacia abajo. Al dar la mano no debe parecer que se da un trato preferente a una persona sobre otra.
Cuidado con cómo colocas los cubiertos
A menos que seas de los que no les importa que reine el caos en la mesa, debes saber que los cuchillos, los tenedores y su colocación pueden romper el decoro de la cena. Si los miembros de la realeza deben abandonar la sala en mitad de una comida pero no han terminado de comer, cruzan sus utensilios, una señal para que el personal deje el plato sobre la mesa.
Si han terminado de comer, colocan el cuchillo y el tenedor inclinados y los mangos deben tocar la parte inferior derecha del plato.
Los vestidos de novia tienen que ser aprobados por la reina
No está claro si el rey Carlos emite opinión sobre esto o si debería hacerlo. Sin embargo, la reina Isabel no solo se encargaba de autorizar las bodas (si debían o no celebrarse), también tenía derecho de veto sobre el vestido de la novia. Es tradición que la reina apruebe el vestido de la novia en todas las bodas de la realeza.
Aun así, es más una cortesía que un mandato, similar a cómo un nuevo primer ministro debe solicitar la aprobación de la reina antes de formar gobierno. La reina aprobó el vestido de Alexander McQueen de Kate Middleton y el de Givenchy de Meghan Markle antes de que se celebraran sus respectivas bodas.
Lealtad a la Iglesia de Inglaterra
La religión es crucial para la monarquía británica. Aparte de la creencia personal y el culto regular, este compromiso es también un requisito constitucional. El monarca es el gobernador supremo de la Iglesia de Inglaterra y el "defensor de la fe". La monarquía tampoco se limita a los anglicanos.
La unión de Inglaterra y Escocia en 1707 comprometió a los soberanos ingleses a defender la Iglesia Presbiteriana de Escocia. Actualmente, la familia real puede casarse con católicos romanos tras un decreto aprobado en 2011; sin embargo, ellos mismos deben permanecer fieles a la Iglesia de Inglaterra.
Cuando el monarca se sienta, se levanta o deja de comer, tú también
Los invitados deben seguir las indicaciones del monarca en cualquier acto, incluso durante un gran banquete de boda. Si cenas con la reina o el rey, solo puedes acercarte a la mesa después de que ellos lo hayan hecho. Nadie puede sentarse hasta que el monarca haya tomado asiento. Los invitados solo comen cuando la reina o el rey lo hacen.
Conviene comer rápido, ya que la cena termina en cuanto el monarca termina de comer. Ni se te ocurra repetir o disfrutar de la comida en una cena real.
No pueden hablar si no se les da permiso
La reveladora entrevista de Meghan Markle con Oprah Winfrey tuvo al público pegado a sus pantallas. Entre las muchas revelaciones que hizo Markle figura la de que los miembros de la familia real no podían hablar sin permiso. Contó que la familia recibía directrices claras sobre lo que debía decir o no en cada compromiso.
Markle dijo que la respuesta estándar a la prensa sobre la mayoría de las cosas debe ser "sin comentarios", a la que se adhirió cuidadosamente tan pronto como ella y el príncipe Harry comenzaron a salir.
La reina solo vestía colores llamativos
Una de las frases más sonadas de la difunta reina sobre su imagen es que "necesitaba ser vista para que la creyeran". Su vestuario con los brillantes colores del arco iris era una extensión de esta creencia. El amor de la reina por los colores neón es legendario en el mundo de la moda.
Le gustaba vestirse con los tonos más intensos de azul, morado, amarillo, rosa y verde, a menudo luciendo un solo color de la cabeza a los pies, con accesorios neutros. Le gustaba que la gente la distinguiera fácilmente entre la multitud. Una monarca siempre debe destacar y no pasar desapercibida.
Los príncipes Jorge y Luis siempre deben llevar pantalones cortos
Para los príncipes Jorge y Luis, siempre es verano, los niños de la familia deben llevar pantalón corto hasta que alcanzan cierta edad. Los pantalones largos son para los hombres y los adolescentes. Según los expertos en etiqueta, la tradición se remonta a la época de los calzones, en el siglo XVI.
En aquella época, los niños vestían togas y vestidos hasta los ocho años. En los siglos XIX y XX, la tradición se transformó y empezaron a usarse pantalones cortos.
Casi nunca comen marisco
Los miembros ha hecho todo lo posible por evitar el consumo de marisco cuando sale a cenar o visita países extranjeros, ya que conlleva un riesgo de intoxicación alimentaria y de enfermedad superior al normal.
No se trata de un mandato, pero la reina Isabel sentó las bases de este precedente. No obstante, se trata de una regla prudente que muchos miembros de la realeza siguen religiosamente. El marisco no debe interponerse en el camino de los deberes reales.